
La automatización industrial consiste en diseñar y aplicar sistemas que permiten que fábricas y talleres trabajen automáticamente de forma más rápida, precisa y segura. Se utilizan tecnologías como robots, sensores, software de control o sistemas de visión artificial para mejorar la producción.
Muchos sectores se benefician de la automatización: desde una línea que envasa alimentos hasta la fabricación de piezas para satélites o trenes.
Este perfil combina tecnología, ingeniería y diseño de procesos:
Mejoran la fabricación de productos muy distintos, desde medicamentos hasta aerogeneradores.
Para realizar tareas repetitivas o de alta precisión.
Programando equipos que coordinan cintas, brazos mecánicos o sistemas de soldadura.
Detectando y solucionando fallos para que la producción no se detenga.
Recogiendo y analizando datos para optimizar el uso de recursos.
La automatización no solo está en fábricas, sino en muchos otros ámbitos:
Sistemas robotizados cortan y moldean materiales para esculturas o instalaciones.
Las bicicletas, raquetas o botas de fútbol se fabrican con procesos controlados digitalmente.
Líneas inteligentes producen y envasan alimentos que consumimos a diario.
Robots que ayudan a fabricar prótesis y dispositivos médicos personalizados.
Las automatización industrial está presente en casi todas las industrias modernas:
Automatizan los procesos de fabricación de vehículos, desarrollando sistemas de ensamblaje y control robotizados
Aplican soluciones de automatización en la producción de aeronaves y componentes aeroespaciales
Automatizan los procesos de fabricación y envasado de medicamentos
Diseñan líneas de producción automatizadas para la elaboración de alimentos
Robots que gestionan almacenes
Diseñan y programan robots industriales para responder a las necesidades de automatización de distintas empresas
Diseñan proyectos de automatización para su implementación en diferentes sectores industriales
Desarrollan nuevas tecnologías en el ámbito de la automatización industrial