
En la fabricación industrial se diseñan y optimizan procesos para fabricar productos con precisión, calidad y menor impacto ambiental. Para ello, se emplean maquinaria y tecnologías avanzadas, que permiten producir piezas muy complejas que luego se utilizan en motores para coches, teléfonos móviles, turbinas eólicas o satélites.
La fabricación industrial abarca con distintas especialidades:
Permiten automatizar procesos de producción de piezas metálicas de gran precisión.
Eligiendo los más adecuados para cada aplicación, como aceros especiales en trenes o aleaciones ligeras en aviones.
Evitando fallos y asegurando la calidad de la producción.
Verificando que cada componente cumple con los estándares internacionales.
Para lograr tolerancias mínimas en sectores como la aeronáutica.
Reduciendo el consumo de recursos y residuos en los procesos productivos.
Además, conecta con otros ámbitos muy diversos:
Se aprovechan residuos agrícolas para producir biogás o biocombustibles.
Los restos de aceites usados pueden transformarse en biodiésel.
Ya existen competiciones de motor con combustibles renovables.
Creando materiales plásticos más ecológicos.
Los profesionales de la fabricación industrial tienen salidas en distintos sectores:
Fabricando piezas y componentes para coches y vehículos industriales
Produciendo piezas de precisión para motores de avión, drones o lanzadores espaciales
Fabricando estructuras resistentes y seguras
Con componentes para aerogeneradores, turbinas o paneles solares
Produciendo piezas pequeñas para móviles, ordenadores o dispositivos médicos
Elaborando estructuras para construcciones y grandes infraestructuras
Creando materiales con aplicaciones industriales muy diversas
Innovando en nuevos materiales y métodos de fabricación
Transmitiendo estos conocimientos en FP, universidades y centros especializados